(la repetición del maravillosa es a propósito )
Pues bien, no soy asidua a los taxis, así que hasta hace poco no podía contarle a nadie bordeando un café la maravillosa historia que me contó en su día un taxista de Barcelona
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Hasta ayer por la tarde
Tenía que entregar unos documentos importantes a una oficina que se queda escondida en la parte más alta y menos comunicada de nuestra ciudad, por donde quedan esparcidos todos los consulados de los países más peculiares... entre ellos Estados Unidos (así lejitos del metro para que cueste ir a protestar... si es que son listos). Calculé con la guia de la ciudad en mano cuánto tiempo tardaría en ir y volver, y teniendo en cuenta que los documentos los esperaban antes de las 18h pues decidimos que era mejor llamar a un taxi avisando de a dónde se debía ir, que al final no se llamó. Error! porque los taxistas deberían conocerse TODA la ciudad pero por todos es sabido que muchos no se conocen ni la calle donde viven.
Así que cargada de confidenciales salí a la calle en busca de la parada de taxis, suerte que trabajo en una zona bastante transitada, repleta de oficinas y despachos, y todos vamos arriba y a bajo con archivos y trajeados (bueno, trajeados y bien guapos ellos, que yo sigo con mi indisciplinaria forma de vestir). Cuando me subí al taxi le dije con muy buena pronunciación la calle a la que debiamos ir, más que nada porque es de esas calles de "nostrat nom i classe" que parece que aunque seas 95% catalonparlante (com jo, tot i que aquest blog estigui escrit en castellá doncs) te suenan raros ... y me contestó en francés. *introducir aplausos y risotadas*.
¿Por qué? Por qué de entre todos los taxistas de esta ciudad tenía que escoger ese taxi.
El caso es que llegamos bien y pronto, entregué los confidenciales y nos vinimos de vuelta. Durante todo el trayecto estuvimos hablando de la ciudad y al acabar me dijo que seguramente yo era una buena arquitecta. Le contesté que no, no que habia estudiado arquitectura y entonces me miró (bueno mejor seria decir que clavo la mirada) por el retrovisor y dijo: